Libro: POR QUE LAS
COSAS PUEDEN SER DIFERENTES – REFLEXIONES DE UNA JUEZA
Autor: MANUELA
CARMENA
1ra Edición: ABRIL
2014
INDICE
I Provocar
el deseo del cambio – Pág. 9
1. La
idea misma del cambio
2. La
empatía con los demás, condición necesaria
3. El
sentimiento de justicia: otra condición que ayuda
4. La
curiosidad, requisito
5. Incitar
la curiosidad: con otra educación, sin duda emocional
6. La
inevitable dificultad de los cambios
Il El cambio y la política – Pág. 71
1. Siempre
en “política”
2. Decanato:
política de la buena
3. Encaramarse
al poder: sentimiento de los políticos
4. Mi
paso por el Consejo General del Poder Judicial
5. La
política en democracia
Ill Cambiar
la justicia – Pág. 121
1. Abogados
diferentes
2. Cambiar
de sitio. La judicatura
3. Contra
la corrupción en la justicia
4. Saber
gestionar
5. La
imaginación, las leyes y la Justicia
IV Las
mujeres y la innovación – Pág. 237
1. Contra
el saber de las mujeres
2. La
violencia de género
V La
innovación y la vejez – Pág. 271
1.
Tuve que “desjubilarme”
I PROVOCAR EL DESEO DEL CAMBIO – Pág 9
1.
LA IDEA MISMA DEL CAMBIO
¿Cambiar el mundo pedaleando?
MC cuenta que desde hace 13 años
dedica la última semana de Agosto a pedalear por distintos lugares con un grupo
de amigos, y que sus conversaciones pasan siempre por como cambiar y mejorar el
mundo.
Miradas transversales, compartidas
Todos en el grupo tienen
diversas procedencias y profesiones, pero comparten la actitud crítica hacia
sus propios mundos y sus deseos de cambiarlos para mejorarlos
Repensar o reinventar, conceptos que surgen. Más preguntas que
respuestas. ¿Sólo cabe la revolución?
MC expresa su deseo de innovar
la sociedad para tener una vida mejor a partir de acciones pequeñas realizadas
desde lo individual pero que acumuladas producirían grandes cambios
Lastres
MC critica los protocolos
habituales que arrastran las instituciones y que suponen un lastre para su buen
funcionamiento. El ejemplo de la ubicación estricta por orden de edad de los
miembros del CGPJ.
Corbatas y chaquetas
MC critica el despilfarro de
energía en aire acondicionado motivado por tipos de vestimenta inadecuados para
el verano pero que se justifican por tradición y afán de distinción
Más allá del frío: indumentaria y poder
MC denuncia el conservadurismo
del sector judicial y los modos de vestir que impone para expresar su poder.
Edmund Dene Morel no miró para otro lado
MC da un ejemplo de acción
individual que produce un gran cambio: el caso de Edmund Dene Morel, un
empleado de una compañía consignataria en el Congo Belga, que denuncia la
apropiación de recursos de su país por parte de Bélgica a cambio de armas para
reprimir el pueblo y permitir asi continuidad de este modelo de explotación.
¿Se podría generar ¨Moreless”?
MC aboga por formar personas
para mejorar el mundo, que sean capaces de descubrir y cambiar las convenciones
absurdas que invaden a todas las instituciones.
Cambios y personas: disfrutar con el cambio
MC considera que para cambiar el
mundo hacen falta empatía, curiosidad, imaginación y pericia. La empatía es la
clave para que las injusticias no nos sean indiferentes.
Otras condiciones junto a la necesaria empatía
MC destaca la necesidad del
sentimiento de justicia, de sentir su necesidad.
2.
LA EMPATÍA CON LOS DEMÁS,
CONDICIÓN NECESARIA
¿Cómo puede surgir la empatía?
MC define empatía como propiedad
específicamente humana que nos permite compartir penas y gozos con los demás.
Dice que no todos los humanos la tienen.
Destaca el libro “La invención
de los derechos humanos” de Lynn Hunt, que defiende que los derechos humanos
son una derivada del desarrollo de la empatía. Y cómo las novelas de
sentimiento jugaron un papel en impulsarla.
¿Cabe el aprendizaje de la empatía?
El ejemplo de la charla con su
nieto sobre los niños pobres de Nicaragua como modo de enseñar a empatizar.
La educación emocional ¿Construir el sentimiento de justicia?
MC cuenta su afición juvenil por
Celia, un personaje de Elena Fortún, autora madrileña que MC reinvindica como autora
progresista y republicana que influyó en el desarrollo de su propia empatía con
los desfavorecidos. MC cuenta que se puso el seudónimo “Celia” en su viaje a
París del 64 para una reunión con la dirección del PC en el exilio. “Celia me
atraía. Una niña rebelde, sorprendente y generosa”.
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